PANTALLA: La pantalla del Galaxy S8 es de 5,8 pulgadas, siendo sus dimensiones (148.9 mm (alto) x 68.1 mm (ancho) x 8 mm (grosor)) similares a las de muchos otros dispositivos con paneles más pequeños.
Con resolución QHD+ (2960 x 1440 píxeles), la densidad de píxeles alcanza los 597 ppp. A este componente no le falta curvatura en sus laterales al estilo Galaxy Edge y es un panel de tipo SuperAMOLED.
PROCESADOR: El procesador del Galaxy S8 es un SoC Exynos 8895 de ocho núcleos que trabaja a 2,3 GHz y en el que se ha utilizado una tecnología de fabricación de 10 nanómetros para aumentar la potencia al mismo tiempo que se reduce el consumo de energía.
MEMORIA: Como se puede ver entre las características del del Samsung Galaxy S8, la RAM integrada es de 4 GB, por lo que se consigue con conjunto compacto y potente.
Sólo se ofrece en una única capacidad de almacenamiento de datos de 64 GB, eso sí, con soporte para ampliarlo mediante el uso de tarjetas microSD de hasta 256 GB.
CÁMARA: Las cámaras integradas en el terminal son de 12 megapíxeles para la principal, que incluye estabilizador óptico, opción de trabajar con ficheros en formato RAW y apertura F:1.7, con posibilidad de grabar a 4K.
La cámara frontal es de 8 MP, con la misma apertura y que graba a 1080p.
BATERÍA: La batería incorporada en el Samsung Galaxy S8 alcanza los 3.000 mAh, incluyendo este componente soporte de recarga inalámbrica y rápida.
CONEXIONES: En lo referente a la conectividad, las opciones son avanzadas ya que es compatible con Bluetooth 5.0, NFC, WiFi Dual Band y, además, no le falta puerto USB tipo C.
Aparte, y como se ve en la ficha técnica que hay a continuación, tiene soporte para conexiones Gigabit LTE Cat 16.
